Foto de Ángel Muñoz

lunes, 31 de diciembre de 2012

Del 12 al 13, salto al vacío




Las emociones han construido el suelo desequilibrante de los últimos meses. Las consabidas y las nuevas, las que han llegado con el ímpetu del dolor, con ese desgarro que nos tira contra las paredes; las de la desesperación, la desesperanza tal vez, que agota las fuerzas como una sanguijuela silenciosa; las emociones inútiles de los enfrentamientos que nos distancian y enfrían partes que antes eran cálidas, que parecía que siempre lo serían...; las de los hijos que crecen bruscamente, sin consideración alguna; las del viaje y sus sabores desconocidos; la de sentarse en las aceras con gente que mira como te gusta que se mire y grita haciendo su voz tuya, nuestra, contra las injusticias; la emoción del pincel y su magia, la del teclado y la suya, la del arte y la literatura y la poesía. La de reconocerse de repente y relajar los músculos que estaban en tensión por mirarse en espejos deformados. Y la risa, como una resistencia. La emoción del amor que se nota, que abraza y que permite, de cualquier modo, sobrevivir a todo lo demás, extrañamente.
Ya sabemos que se trata de esto, de lo que nos encanta y de lo que nos desencanta, es ese pulso vibratorio, en el que a veces nos rilamos, no siempre hay fuerzas, no siempre se sabe cómo. A veces sólo se trata de mirar, entre el pavor y la sorpresa, lo que nos ha ocurrido.
Empiezo el año, como siempre, sin propósitos de enmienda ni de futuro, pero con un par o tres de cosas aprendidas que puede ser que no sirvan de mucho o a lo mejor allanan el camino o mejoran mis pasos o mi salto al vacío.
Con tan pocas certezas me comeré las uvas mirando al mar, oscuro.

viernes, 28 de diciembre de 2012

Tres hombres hablando bien de las mujeres





Con una casta, una voz y un dibujo excepcionales, Inma Luna hila lo vital y lo literario para que lo difícil parezca fácil y lo fácil tenga color y poso. El de Luna es aquí un recorrido hermoso por paisajes breves, enteros y lúcidos. Lean a Inma Luna. Lo agradecerán. 
(Alejandro Palomas)

Así es como me gustan a mí los cuentos, pulidos de flecos innecesarios, dosificando a conciencia la información suministrada con la que va avanzando la historia, justo lo necesario para que la digestión sea perfecta, con el tempo preciso, el lenguaje seco y contundente, adaptado a cada uno de los argumentos, la escritura al servicio de lo contado y no lo contado al servicio de la escritura, el tono camaleónico pero siempre acertado, los personajes absolutamente creíbles desde el primero de sus movimientos, desde la primera de sus frases, los diálogos reales, la flecha en el centro mismo de la diana cada vez que se dispara, la cuerda siempre tensa.
(Jordi Macarulla)
 
Inma es un chef en la cocina literaria; en el momento inesperado, el ingrediente que transforma sus cuentos en magníficos llega a la cita del sazón, asombrándonos. Se le da la magia de lo cotidiano y es capaz de ver la tragedia en un mundo diario donde otros sólo alcanzan a percibir el drama.
(Dante Medina)

martes, 11 de diciembre de 2012

La gran ola, un regalo

Mi querido amigo poeta y compositor José Blanco me envió este regalo hace un par de días: había puesto música a uno de los poemas de mi último libro "Existir no es otra cosa que estar fuera", La gran ola.

Lo más extraordinario es precisamente la extrañeza que me produce, lo ajenas y al tiempo reconfortantes que resultan esas palabras que han salido de dentro y ahora parecen estar fuera, porque existir no es otra cosa.

La gran ola, la que se lleva todo por delante, la que ahora parece querer embazarme, la que Jose ha sabido hacerme mirar de otra manera, sin el temor.

Algunas fotos que tomé en la isla de El Hierro han servido de envoltorio para este regalo.



sábado, 8 de diciembre de 2012

Mujeres que miran con los dos ojos

El arrojo, la imaginación, la constancia y la resistencia son las propuestas que, para cambiar las cosas, se plantean en las dos pelis que he visto en las últimas noches: la libanesa ¿Y ahora dónde vamos? y la francesa La fuente de las mujeres.
¿Y ahora adónde vamos?La fuente de las mujeresUna vez que los objetivos están claros, estos dos grupos de mujeres, de diferentes lugares y con distintos condicionantes, hacen acopio de todo su valor, apretando los dientes ante el dolor que chilla, con un ojo puesto en el dictado del corazón y otro en el de la razón, tiran por tierra absurdos e inamovibles dogmas de la tradición y la religión, que favorecen todo tipo de injusticias.


viernes, 7 de diciembre de 2012

Inmortalidad o la creación

Puede que todo el arte sea una misma cosa.
Es muy posible que escribir, dibujar, componer, cocinar, cantar, bailar, rodar, proyectar... nazcan de un órgano común e ignoto.


Construir un poema desde una cámara de fotos siendo quizá inconsciente, como de toda magia. 
Soñar un edificio, o imaginar tan sólo las nubes que rodean el amarillo.


Casi nada sabemos de la fuerza que mueve nuestra mano sobre el papel.


 Un tacto alentador, que inquieta, que se hace contracción productiva, contracción de dolor y júbilo, de parto.

El lienzo
devuelve
la imagen
del misterio.

Ha muerto Niemeyer.

Ya sabemos que NO.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Sudor de barandilla

Respondo de la angustia,
del dolor en el pecho.

Respondo de esta alegría loca
y de este llanto hiposo,
de los desgarros en la sábana,
la mancha color de mariposa,
el arrebato anímico.

Yo no sabía que se hacía tan largo
este camino al filo,
este sudor de barandilla.

Cuando vivía sin escalas
no había tantas olas.

Tampoco me brillaba el pelo tanto.