Foto de Ángel Muñoz

domingo, 21 de marzo de 2010

Si fuese posible...

Si fuese posible, posible de verdad, huir un rato, convertirse en un punto, en un lunar, en un anónimo topo, entre otros muchos, que ni se miran ni tienen necesidad alguna de entenderse.
Si pudiésemos ser un punto sin luz, abstracto, sin funciones, sin ningún compromiso ni deber.
Si nada malo nos pasara nunca, nada que hiciese deseable la huida...

domingo, 14 de marzo de 2010

Lila


Lila nos trajo luz y sandunga. Tuvo la fuerza catártica que necesitábamos. Levantó a mi madre de la silla. Hizo que hubiese merecido la pena. Nos emocionó, nos divirtió y le agradecimos cada nota de su voz irreverente y caótica. Convocó a Chavela, a Frida, a la india Mara. Lila Downs nos arañó en el pecho y nos dejó la marca. Mi madre se acordaba todo el rato de mi padre, de lo que le hubiese gustado verla. Le compramos un cd. Ojalá la hubiésemos podido invitar a cenar en su casa, para que hubiese probado su bizcocho. Mi padre ha pasado hoy un mejor día, está contento porque ha podido lavarse y afeitarse sin fatiga. Mi madre tarareaba Agua de rosas mientras le cocinaba un asado sorpresa.

Eres... vara de Romero
madre del deseo
que el rio cantó
Eres....suripanta del pueblo
la mujer que mas quiero
que me da de beber
Agua de Rosas
dame de beber
Ay... Ay...
Que esta tristeza
acabe de una vez...
Ay...Ay...

viernes, 12 de marzo de 2010

La vida en común, el relato

En La República Cultural Javi Álvarez dice lo siguiente:
La vida en común habla del desgaste de una relación con la vida cotidiana. Un desgaste que termina en silencio y canciones escuchadas por la radio. Es una especie de estar muerto sentado en un sillón, viendo la televisión y sin otro aliciente. Como idea bien, pero a la hora de plasmarlo se queda en una sensación interior de la protagonista que no llega a cuajar en el corto. Uno se queda más bien frío, cuando la intención inicial sin duda habría sido la de remover conciencias.

No tengo ni una coma que mover al respecto. Sin embargo, me apetece publicar el relato en el que se basa el corto para quien no lo conozca. Pertenece a mi libro Las mujeres no tienen que machacar con ajos su corazón el en mortero.

La vida en común
Como siempre, mi marido llegó a casa cuando yo estaba preparando la cena. Como siempre, se sentó en el sillón y ni palabra. Empuñó el mando a distancia y puso en marcha el televisor. Como siempre, había fútbol.
Era un día igual a cualquier otro. Su misma cara, el traje idéntico al que llevaba el día anterior, la semana anterior, el mes anterior. Los mismos ojos extasiados ante la pantalla, su aspecto pánfilo, su desidia y su silencio, su perpetuo silencio.
Nunca se alteraba, ni siquiera con el partido. Simplemente miraba. Se entregaba al televisor con ojos de vaca. Me recordaba a los recién nacidos que contemplan impasibles lo que les rodea sin comprender un ápice.
Esa noche volví a insistir. Ya resultaba malsano pero no podía evitarlo. Cada noche el mismo monólogo. -¿Quieres cenar? ¿Qué te apetece? He hecho tortilla, con cebolla, como a ti te gusta. También puedo prepararte un sándwich-. No sé porqué lo hacía. No tenía sentido. Podía decir cualquier otra cosa y le hubiese dado igual. Podía decir, por ejemplo: Juan, voy a agujerearme el corazón con la taladradora. Juan, me tiré por el balcón esta mañana. Juan, te quiero.
Le llevé un buen trozo de tortilla y lo dejé en la mesita baja de comedor. Yo cené en cocina. No me acostumbraba a estos días de fútbol. Días de fútbol y silencio. Noches para la soledad. Así llevábamos años, quizá décadas, hasta puede que nunca hubiésemos tenido nada mejor.
Me tomé un café y metí los cacharros en el lavavajillas. Puse la radio. "María de la O, qué desgraciaíta, gitana tú eres, teniéndolo tó". Me senté junto a la ventana. Encendí un cigarrillo.
A través de los cristales, televisores del vecindario. Voces, mezcla de voces. Chapurreo de presentadores más o menos familiares. Comunicación intercanal. Aparte de las teles, nadie hablaba.
Y la canción en la radio. "Te quieres reír y hasta los ojitos los tiene moraos de tanto sufrir". Tarareé.
Escuchaba la televisión de mi vecina de enfrente como si estuviese en mi propia cocina. Lo que necesitas es amor. Claro, pensé, María de la O, lo que necesitas es amor.
Apagué el cigarrillo y apagué la luz.
La canción también terminó en la radio.
Antes de acostarme, un nuevo intento. Entré casi desnuda en el comedor justo en el instante en que se iniciaba la tanda de penaltis. Si seré imbécil. Mi cuerpo se volvió transparente.
Cuando me iba a la cama le di las buenas noches. No contestó.
Por la mañana seguía allí, con los ojos muy abiertos ante el televisor. El forense apuntó las cinco de la tarde como hora probable de la muerte. Yo juraría que cuando llegó a casa estaba vivo pero con estas cosas nunca se sabe.

jueves, 11 de marzo de 2010

La visión de Boutaina



Boutaina es una joven alumna en el master de cultura hispánica y comunicación en la facultad de letras y ciencias humanas universidad Abdl el Malek Esaidi en Martil cerca de Tetúan. Su profesor, Abderahman El Fathi, querido compañero de viaje, le ofreció mi primer poemario, Nada para cenar, para que realizase un trabajo sobre él. Voy a transcribir aquí la parte fundamental del mismo, que iba acompañado también de una entrevista y más datos biográficos. Me resultó emocionante lo que Boutaina -no hay que olvidar desde dónde escribe-, observa en mis poemas. Estos días, la generosidad de las personas me está abrigando como no se imaginan y tampoco saben la falta que todo esto me hace. GRACIAS por el cariño.
Análisis del poemario

A lo largo de 60 páginas , Inmaculada Luna ofrece una visión agridulce e irónica de lo que le rodea, de sus inquietudes y de los colores visibles y ocultos, de las relaciones de su entorno y todo del mundo de las mujeres.
“Nada para cenar “ el poemario apareció en el año 2005 cuando Inma obtuvo el premio de poesía otorgado por el ayuntamiento local de Leganés (Premio Villa de Leganés) publicado por LFC Ediciones.
El poemario compuesto por 48 poemas : el primero titulado* Ni nadie*, y el último *A punto* . Todos muy cortos de versos , pero llenos de sentimientos de una mujer que los expone de una manera nueva, narrada metafóricamente sobre el amor, el desamor, la soledad, el júbilo de los encuentros, los sueños….
Descubrimos durante nuestra lectura la lucha de la poetisa por la supervivencia de la mujer en la vida de los azares. Siempre sonriendo amargamente a la vida a escondidas. Ms bien una sonrisa que por más dolorosa que pudiera ser , aparecía delicada y serena como puede
ser la risa de alegría . De esta forma Inma Luna nos sorprendió con este libro convirtiendo la mujer en protagonista de la vida. En su Primer poema titulado* Ni nadie* Inma expone el enigma de la mujer. Los sentimientos de la mujer siempre han sido para el hombre un misterio, por eso dice la poeta :
Nadie me conoce
Ni mi psiquiatra
Ni la alcachofa de la ducha
Ni mi taza de café
Nadie sabe nada de mí….
También destaca la visión del feminismo , los hogares que denuncian un conflicto oculto y las situaciones de desigualdad que son muy evidentes en los poemas. Ella plantea la idea clásica , la tarea de la mujer es conseguir la casa limpia , la comida y la ropa listas para el resto de la familia es porque este modelo ha sido conveniente para una sociedad marcadamente patriarcal . Lo que ella pone en su pluma es, el modelo de un hogar que es un punto de de encuentro, donde convive gente que se supone que se quiere. Es un espacio del que todo el mundo debería ocupar hasta el punto de convertirlo en algo confortable.
En su libro Nada para cenar se van construyendo versos que tratan la rebelión de la mujer , la necesidad de una mujer para mostrarse como es y no quedarse como una esclava de las tradiciones sociales, como ejemplo escuchamos el poema Hambre página 21dice Inma:
Hoy tengo hambre
Hambre de atracón
Quiero sol,
Sexo,
Helados,
Mar,
Música,
Bombones,
Atardecer,
Césped,
Cine

Ah, que se me olvidaba,
también quiero una siesta
una de esas hermosas,
que te dejan dulzor de caramelo en el paladar
y un rastro de babilla por la comisura…

Verso por verso nos va contando la autora que esa mujer está en un punto determinado del amor, del dolor, de la cólera, …nos lleva de excursión a las afueras de un mundo lleno de sorpresas, donde brilla la imaginación y lo inesperado , donde los muros de realidad queden al
descubierto.
El misterio y sus enigmas que Luna pone al lector aparecen en los pucheros , en el universo que nos rodea en la aromas de los espacios, en la historia de la gastronomía que nosotros mismos nos sumergimos en ella sin darnos cuenta, como lo demuestra el poema Doméstico III
página 36.

Tenía la sartén al fuego.
Estaba muy caliente.
Freí suspiros.
Lo había rebozado.
Me di de merendar dulzuras.
Tomé de postre un beso muy tostado
y me fui a dormir
Con la miel en los labios.

Esa noche no había
nada para cenar.


El lenguaje utilizado es despojado de toda retórica . Cotidiano y simple. La escritura no es fácil ni tampoco elaborada, sino que tiene su misterio. Inma emplea la ironía y el sarcasmo en muchas de sus expresiones , lo usa como espejo para mirarse a si misma. Lo muestra en el poema Mordedura página 28.

Ahora me han hecho herida unas sandalias viejas.
¿Cómo puede hacer daño algo a lo que se supone que ya
Deberías estar acostumbrado?

Manifiesta una expresión simbólica y compleja. Aquí coinciden lo feliz y lo infeliz en otras palabras. Las personas tenemos que intentar ser felices, que el amor o la amistad no supongan un sacrificio, las relaciones que condicionan nuestra vida hasta el punto de convertirnos
en infelices, no tienen nada que ver con el amor, sino con las circunstancias , con la dependencia , con la inseguridad.
Dos términos que destacan en este poemario son :
Decepción y pasión aunque la poetisa no lo revela claramente, se nota por la decepción , creo que lo utiliza para buscar inmediatamente un antídoto infalible, alguien o algo. Y para la pasión ,es un terreno abonado para encontrar las mejores historia las conmovedoras, las pasiones te hacen replantearte los principios más firmes.
Inmaculada Luna ha cargado este poemario en instantes tristes, rutinarias y al mismo tiempo inolvidables y alegres, sus frutos son momentos prodigiosos y así lo hizo la poetisa, los ha guardado en este libro Nada para cenar que cuenta los sentimientos amor, nostalgia, melancolía….
Luna escribe sobre lo cotidiano y lo palpa con bellas, palabras y no termina sonando a un anuncio o a un culebrón.

Conclusión
Lo primero que el lector saca del extraordinario libro titulado Nada para cenar de Inmaculada Luna, es el tema feminismo que abarca todos los poemas , cuyo planteamiento se basa sobre la mujer como protagonista.
Nada para cenar da una visión muy particular del mundo de la mujer, le empuja cuando siente que no es feliz en el papel que está desempeñando, a buscar alternativas.
La autora usa un lenguaje cotidiano y despojado de toda retórica, también aparece la ironía y el sarcasmo que usa para mirarse a sí misma.
En el libro hay mucha vida cargada de instantes que jubilosos, tristes o rutinarios nos dieron momentos prodigiosos, que siempre querríamos que permanecieran con nosotros en algún lugar más fiel que la memoria.
Debido a su sinceridad Inma nos ofrece palabras vigorosas en esta obra de poesía.

lunes, 8 de marzo de 2010

Mi corto en el Círculo de Bellas Artes


La vida en común, el miércoles en la Semana del Corto de la Comunidad de Madrid, en el Círculo de Bellas Artes.
Sinopsis:Una pareja en crisis. Sufren. Son infelices. Se miran pero no se ven. Han dejado de comprenderse. El marido ha dejado de hablar, pero tal vez está demasiado callado.

... Y más sobre las mujeres cuentistas




Carmen Fernández Etreros en el blog La tormenta en un vaso
cuenta estas cositas sobre las Mujeres cuentistas
Ocho escritoras unen sus relatos en esta antología Mujeres cuentistas abarcando desde el cuento de cierta extensión hasta el microrrelato o microcuento. Mujeres, como en el cuento de Palabras que convocan de Ana Pérez Cañamares, “inmunes a todo excepto a las palabras”. Una iniciativa de la editorial Baile del Sol que si bien me encanta porque cada vez son más las antologías que acogen ese ambiente femenino, esa singular manera de contar y relatar, por otro lado y después de leerlo con calma descubro textos de desigual calado, como ocurre en muchas otras antologías.
Eso sí descubro relatos extraordinarios y hondos como En el espejo de Inés Matute o Sobre la pena de Marina San Martín, rectos y directos como Pundonor o La ilusión de una viuda de Inma Luna, frágiles y desconcertantes como El cuento verdadero o rotundos como Un chófer para Eastwood de Ángeles Jurado. Quizás lo corriente hubiese sido alinear por temas o intereses pero la editora los agrupa por autoras: Inés Matute, Inma Luna, Ángeles Jurado, Ana Pérez Cañamares, Marina San Martín, Roxana Popelka, Déborah Vukusic y Carmen Camacho.
En la antología Mujeres cuentistas encontramos relatos y ficciones sobre el amor y el desamor, los encuentros inesperados y las relaciones de pareja, los sueños y las ilusiones, las fantasías nocturnas y noctámbulas y una pregunta constante por el paso del tiempo.
No puedo citar todos los relatos, más de sesenta en total, pero sí me atrevo a afirmar que los microrrelatos de Inma Luna o de Ana Pérez Cañamares son verdaderas piezas de museo minimalista, muestras de la hondura a la que se puede llegar con pocas palabras como El arte final, Pundonor, La gacela y la leona o Palabras que convocan. Los relatos de Ángeles Jurado Quintana son todo un descubrimiento que da una vuelta a cuentos clásicos como el de la Cenicienta en Conociendo a la madrastra o a la princesa y el sapo en el ya citado El cuento verdadero.
Muy originales los de Déborah Vukusic con Delicias, Mon amour, ‘Mustafá y el ruiseñor o su tremendo Borges ha muerto. Y la Antología termina con los cuentos de Carmen Camacho, entre los que cito un relato divertido y sorprendente Colmaré todos tus sueños que logra que el lector acabe el libro deseando leer más y más relatos de mujeres cuentistas.
En suma una propuesta interesante y necesaria que podría extenderse a futuras colecciones de mujeres cuentistas que muestren ese espíritu femenino, vagabundo y diverso.

jueves, 4 de marzo de 2010

A UTOPIA acontece na Póvoa de Varzim

El año pasado estuve en las Correntes d’Escritas sólo un par de días y de visita. Percibí, sin embargo, el peso de ese encuentro. Este año, ya con las manos manchadas de harina, el encuentro literario de Póvoa me ha vuelto a sorprender y a emocionar. Ha sido como un abrazo, como un impulso, como un soplo de energía literaria y humana.
En Correntes percibes el entusiasmo con el que sus organizadores trabajan, la implicación de la administración –asombrosa!-, el interés del público que llenaba el auditorio en todas las sesiones para ¡escuchar hablar de literatura! Igual daba que fuesen las diez y media de la mañana que las tres de la tarde, ¡las tres de la tarde! El público tomando notas en sus libretas de forma casi compulsiva, participando en los coloquios, asistiendo a presentaciones y mesas redondas, riéndose, aplaudiendo, aportando… ¡comprando libros!
En Correntes -un encuentro, como me decían ayer mismo en un mail, con muchos efectos secundarios-, se recupera la fe, dan ganas de saltar de alegría pero, sobre todo, dan ganas, muchas ganas, de seguir escribiendo, aunque sólo sea por poder compartir el vinho verde con algunos de los escritores y escritoras de los que tanto he aprendido en estos días y no sé si llegarán a saber cuánto se lo agradezco.
El abrazo de Manuela Ribeiro resume bien el abrazo de las Correntes d’Escritas, es igualmente acogedor.


Foto del departamento de comunicación de Correntes, con la mayoría de los participantes, en el cierre de las jornadas.

Periférica e indigente


lunes, 1 de marzo de 2010

Gracias, Póvoa, por el impulso


Foto de Alexandre Conceição, que generosamente me ha enviado una veintena.


Póvoa de Varzim, 26.02.2010 - "O poeta é o gourmet do recôndito." esta foi a afirmação de Inma Luna que marcou a 6ª mesa do Correntes, esta tarde, no Auditório Municipal. Moderada por Francisco José Viegas e tendo como ponto de partida a frase de Agustina Bessa-Luís "O poeta é um predador", a sessão reuniu à mesma mesa Inma Luna, Ivo Machado, Jorge Melícias, Tiago Nené e valter hugo mãe.

Inma Luna revelou ao público que fez questão de levar um vestido com um leão para sentir na pele o papel de predador conforme a temática da sessão lhe sugeria abordar “O poeta é um predador”. “O poeta não sabe que é poeta até comer o primeiro pedaço de carne viva.” foi deste modo que Inma Luna iniciou o seu discurso e recorrendo a uma espécie de analogia zoopoética identificou o poeta lobo, o poeta crocodilo, o poeta anémona e o poeta serpente. Depois de caracterizar cada um destes poetas, a escritora alertou que não nos devemos esquecer que os poetas, como a imensa maioria dos predadores, estão em perigo de extinção, intimidados pelo mercado e suas condicionantes e desanimados pela desvalorização do sonhador acrescentando que o desaparecimento de uma espécie supõe que esse nicho ecológico seja imediatamente ocupado por outro, como por exemplo burocratas, banqueiros, políticos e dirigentes. No entanto, Inma Luna considera que a poesia segue querendo mudar a vida e para fazê-lo, o poeta seguirá devorando-a, aplicando-lhe as suas tácticas de atracção. A escritora terminou dizendo que “A predação tem uma função muito importante na natureza, por meio dela controla-se a povoação. O poeta, como predador, deveria contar com um tipo especial de protecção, devia ser tratado com mimo, prestigiar a sua tarefa, dar valor ao seu mordisco”.
Jorge Melícias afirmou que “a poesia é sempre uma encenação da verdade”, motivo pelo qual “tanta coisa é desculpada aos poetas”. O escritor não se considera um poeta místico, revelando que “sempre encontrei mais poesia na tosse dos tísicos do que nas chagas dos justos”, vendo a sensibilidade do lado do predador e não da presa. Jorge Melícias referiu ainda um real transmudado em que o poeta é um predador dele mesmo numa constante luta contra os seus próprios demónios, “o poeta é o predador de um real”, acrescentou. “Procuro que cada poema meu seja uma dádiva de pura violência”, disse o escritor que pensa que “a beleza está cada vez mais ligada à violência”.
valter hugo mae assumiu-se como um predador e referiu que “ando sobretudo à caça da satisfação”, “falta-me tempo, quero mais”, “quero ser feliz no meio de tanta coisa”. Depois destas revelações, o escritor vilacondense partilhou a sua «história com os bichos» e o modo como se habituou a pensar tragicamente que os bichos eram capazes de sobreviver à sua ausência. Num registo irónico, valter hugo mãe confessou “sou um predador à caça de amigos por mais esquisitos que eles possam parecer. Eu sou um predador disto, o outro lado das coisas.”
Tiago Nené considera que “mais do que um predador, o poeta é um performer” e a poesia uma performance que ultrapassa a realidade. O poeta como predador absoluto é aquele que à distância segue a ordem do seu poema, na busca pela naturalidade, continuou o escritor que pensa que “o poeta não tem que dizer a verdade. A ficção como parte de uma realidade parte do contexto biográfico do poeta”. Tiago Nené disse que não existe uma definição exacta de poeta, “os poetas desejam desejos (dissecação de desejos) e é a partir desses contextos em que o poeta se auto-coloca que surge a poesia”, esclareceu acrescentando que “a boa poesia está acima da importância de existir”.
Ivo Machado começou por partilhar com o público a história sobre o primeiro poema que escreveu, dirigido à namorada, e que após o ter entregue só voltou a vê-la 35 anos depois. O escritor referiu algumas das “inesgotáveis definições de poeta” que o marcaram ao longo da vida entre as quais citou um poeta francês que dizia “Se perguntarem a um camponês grego o que é um poeta ele dirá que é aquele que canta, mas se o perguntarem a um homem culto da cidade ele dirá que é aquele que escreve versos”. “A poesia, na sua essência, é subversiva. O poeta proclama e subverte, outras vezes, prefere fechar os olhos para ver mais claro” afirmou o escritor que define o poeta como um recordador infatigável que fala aos mendigos e aos loucos, fala a todos que o queiram escutar e “poderá ser também um ajudante de Deus". Ivo Machado disse ainda que os governantes procuram silenciar os poetas mas citam-nos e “qualquer político sabe que uma só palavra pode matar a nossa sede” mas “quando se é poeta, há que aceitar ser ingénuo”, concluiu.