Foto de Ángel Muñoz

viernes, 20 de enero de 2012

Rui Costa, morir en medio de la tristeza

Mi querido Uberto me anunciaba esta mañana la muerte del poeta portugués Rui Costa, con el que compartimos palabras ibéricas, encuentros y noches de norte y de sur peninsular.
Siempre le imagino en esta foto borrosa y le recuerdo en una larga charla nocturna, en una barra, también desenfocada por las horas y el alcohol. Frases no acabadas, introspecciones, descreimientos, saudades inconcrentas.
Traducciones poéticas en servilletas de papel. Libros y citas compartidas. Ahora Rui se ha ido, arrastrado, sospecho, por una gran tristeza.
Buscaba la última foto que nos hicimos juntos, en Povoa, hace un par de años. No la encuentro. También salió desenfocada.

Autobiografía
no lo necesito pero tú sabes cómo yo soy
me encamino poco me divierto así en las copas
de los árboles soplando pensamientos para el mundo que hay de noche.
las personas cuando se despiertan son otras, ya lo sabías,
esa niebla contemporánea del miedo pequeñito
que perdemos en las ciudades y en los cuerpos, tú entraste
antes que yo en los juegos, el azufre de la música y el
lazo del hechizo, inocente hombre breve que sueña
tú bien sabes
Después alquilé la bruja durante una vasta noche.
y mi vida cambió, la noche creció,
el vértigo me ardió en los brazos hasta la sangría
del tedio cuando para siempre juzgué que te perdía.
En la lucha perdí uno o dos brazos,
más que lo que tenía. pero esta memoria es un palacio,
son corales en el pensamiento. jardines y fantasmas,
el corte en las manos sorbiendo, niño estratosférico
y profundo: sin brazos y ahora sin nada más.
no me entendiste, me llené de furia.
es un arte, quería decir, matar sin retroceso y atraso-
ah aquellos brazos para apoyar las manos-,
sin el miedo ronco sin el suelo que es poco.
segando. saturno. y. el. viento. en. la. proa. irguiendo.
el: navío: en: el: mar: parado: parado: completamente.
parado. cómo decirlo? no decirlo. yo soy. una vida
horrenda y múltiple. y ahora descanso
acostado en estas manos que mecen
sin apoyo, sabes, naciendo de tus ojos
por la mañana


el tamaño impensable de las flores
me agarra al suelo

y no sirve de nada encontrar un lugar
donde pueda ser cualquier cosa

RUI COSTA

Con mi recuerdo, con mi cariño, con mi tristeza.

2 comentarios:

GASTROPITECUS GLOTÓN dijo...

Nunca se entiende esa muerte. Esas muertes. Y releer sus versos además de doler rompe la ligera alegría que siempre convocan las palabras que él ordenó para el mundo. Nos alejamos por el cuido del mundo y lo olvidamos por un rato. Sólo.

María Jesús Siva dijo...

Mi ignorancia me lleva a reconocer que no lo conocía. Me entristece la pérdida, parece muy joven en la foto. La muerte nunca llega en el momento adecuado. El poema que adjuntas me parece sereno y eterno.
Un beso, Inma.