El presente, la realidad, los sueños. Aquí se estrellan contra el farito, se espuman, salpican los cristales de sal, arena y agua, el cóctel al que hueles, al que olemos aquí. Y me pregunto mientras me envuelvo en tu saliva cuál es la vida verdadera, la que hacemos tú y yo en la casa del barco, en la calle del sol, o la que espera fuera llena de papelajos y de cosas que pican...
4 comentarios:
El presente proyecta en el futuro las omisiones del pasado.
Así, la vida verdadera es sólo la que tenemos, no la que ya dejamos o la que esperamos que venga.
Es posible que si nos dieran la oportunidad de elegir cual es la vida verdadera, dejandonos seleccionar una u otra, acabariamos quedándonos con la misma que tenemos.
Me compro esos dos comentarios. Y me quedo boquiabierto por lo que dicen (y por lo que no) tus poemas prosa de las últimas semanas. Disfruta de tus vacaciones y tu mirada, Inma.
Osiris, ojalá lo tuviésemos tan claro.
Brisuón..., o no.
Pedro, gracias por la visita y los deseos.
Besos.
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